las rutas de transporte público que deberían dar servicio en este espacio ni siquiera ingresan al lugar
Concentrar multiples rutas de transporte público en un mismo punto para beneficio de los usuarios parecía una buena idea, sin embargo, en el ejercicio del día a día, en Centro de Transferencia Multimodal (Cetram) de la Línea 3 de Tren Ligero, está lejos de cumplir su propósito y actualmente luce como un espacio moderno, pero abandonado.
Ubicado debajo de la Glorieta de la Normal, el Cetram prometía ser una central de autobuses que le facilitaría a los usuarios de Tren Ligero y trasporte público, una movilidad segura y accesible que concentraría 11 rutas de transporte urbano.
Pero a un año de operaciones, la realidad es muy distinta el Cetram luce vacío gran parte del día y los usuarios de la mayoría de las rutas involucradas deben de salir de las instalaciones de la Línea 3 para acceder al servicio.
De acuerdo a usuarios, de las once rutas de camiones, se puede acceder únicamente a tres de ellas, la C90, C91 y C92 que circulan hacía San Esteban e Ixtacán, mientras que la ruta suburbana a Yahualica, que también tocaría base en este punto, jamás se incorporó al servicio.
Por otra parte, de acuerdo a la versión de operadores de unidades que, si ingresan al Cetram, el principal inconveniente para las rutas que no llegan a este sótano es el corte de derrotero, “tiene que hacer un rodeo porque vienen de Ávila Camacho y la entrada está por Alcalde”, pero no se trata solo de los conductores de las unidades, sino que ingresar al Cetram también resulta molesto para pasajeros a los que el desvío del camión les representa perder hasta 15 o 20 minutos de tiempo en su recorrido.
El amplio espacio del Cetram luce vacío, las unidades no ingresan y los pasajeros ya lo saben, de tal manera que este lugar se ha convertido en “el frijol en el arroz” de la Línea 3 de Tren Ligero.
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